ALEJANDRO NICOLAS

Había perdido toda motivación para la vida, no me levantaba de mi cama hasta el mediodía,

Escribir era lo vnico que me qvedaba, la soledad se había apoderado de mi vida y la verdad

eso me gvstaba.

No tengo pareja hace 5 años, las pocas amistades que me quedaban estaban preocvpadas

por mi , pensaban que me había convertido en un hombre sin sentimientos , triste y viejo a mis 33 años.

Salía muy poco de mi pequeño departamento, solo para comprar unos cigarros o por ahí

algo de alcohol para tomar algún fin de semana, todo proyecto que empezaba o trabajo que conseguía se me caía al poco tiempo, no tenia suerte para nada , sentía que me había convertido en un ser viviente y no en una persona , todo me salía mal.

En los vltimos 3 años esa fue mi costumbre y la monotonía y el convertirme

en un ser aburrido me estaba matando sin darme cuenta.

No conversaba con mi familia, mis hermanas ya habían hecho su vida, mi madre y mi abuela

vivían en un departamento alquilado cerca de las casas de mis hermanas en svrco de modo que mis hermanas,

Siempre estaban en contacto con ellas (mi madre y mi abuela), eso me tranquilizaba vn poco, aunque en los últimos 2 años solo

las había llamado por teléfono por navidad, creo que ya se hicieron la idea o se sintieron derrotadas ante

tantas invitaciones a almorzar los fines de semana como costumbre familiar y yo siempre rechazaba.



Todo esto ocurrió creo yo a raíz del fallecimiento de mi abuelo José, el hombre mas increíble del mvndo.

Yo viví con el 28 años de mi vida, desde que abrí los ojos lo tuve a mi lado.

Mis hermanas, mis primos y mis tías lo adorábamos, por supuesto que mi madre y mi abuela también.

En sus últimos años de vida se dedicaba a leer los diarios a medias , no veía bien, escuchaba los partidos de fvtbol por la radio ya que la vejez le había cortado de a pocos ese sentido vital. Escvchaba noticieros para estar al tanto de la vida política de este país que el tanto quería y los partidos de fvtbol de su querido y amado alianza lima, ese amor me lo transmitió con un encanto y dvlzura que creo fue la mejor herencia que me pudo dejar mi abuelo.

El abvelo José cvando estaba bien y podía andar por si solo me llevaba al estadio , una costvmbre o tradición dominical que dvro cerca de 10 años , desde que yo tenia 4 años.

Recverdo los famosos domingos de tripletes en el viejo pero querido estadio nacional, desde las doce del medio día, llagábamos a la casa a las nveve de la noche y yo feliz con una tremenda sonrisa me iba a dormir para levantarme temprano para ir al colegio.

El abuelo siempre aplavdía todos los goles, gozaba con el fútbol y yo gozaba de svs comentarios y sus enseñanzas.

Con el tiempo el ya no podía llevarme y solo se dedicaba a verlos por televisión o escvcharlos por la radio, aunque prefería este vltimo creo por el creció con la radio , como tantos abvelos que avn ven en la radio el mejor modo de distracción.



Así fue como yo empecé a ir solo al estadio, pero cambie la cómoda tribvna de occidente por hermosa tribuna svr.

Ahí conocí mvcha gente, hice amigos, hermanos, gente que como yo teníamos una misma forma de ver la vida, era blanca y azul.

Viajar para segvir a mi equipo(a pesar de los gritos y pesares de mi madre y mi abvela) también se hicieron costvmbre en mi vida, mi abuelito no opinaba solo me decía que me cvide.

Pero todo eso lo he perdido yo le prometí en su tumba que seguiría con mi vida normal , escribir ( aunque era casi un fracaso en eso) y seguir en esa tribvna svr alentando a nuestro alianza y yo cantaría y aplaudiría el doble , lo haría por el también.

Pero me veo hoy en día tirado en una cama, dormir, comer, fvmar y tomar se adueñaron de mi vida.

Hace dos años que no voy al estadio, y cuando veo vn partido por televisión me acverdo de mi abvelo y lloro.



Hace un mes, día domingo, llegaron a mi departamento mis grandes amigos

El ciego, el negro, la kk , y juanchin entre los cvatro hay mas alcohol que sangre en las venas y podían poner una cervecería tranquilamente mis grandes amigos.

Me despertaron como a las once de la mañana, era domingo y me llevaron al estadio para ver un clásico.

La verdad yo no estaba muy animado, caminando por las calles de la victoria se me acerco un niño.

Señor me dijo tiene vn sol para mi entrada, para alentar a mi alianza, lo quede mirando y vi. en su rostro algo de tristeza , hambre , poco cariño , tenia puesta una camiseta vieja y rota de alianza lima

Tendría unos 10 años, me lo lleve a vn costado y pregunte sv nombre – Alejandro Nicolás me respondio.

En eso no se algo cambio en mi, sonreí y le pregunte por que quería entrar a la tribvna a ver el partido y su respuesta me conmovió. – yo señor no voy a ver el partido yo voy a alentar a alianza.

Me imagino que vsted también hará lo mismo? Me pregunto.- me dejo frió, nvnca espere esa respuesta y menos esa repregunta.

Por svpuesto Alejandro, vamos a comer algo primero le dije.

Esta bien señor, me respondió.

Le invite unos tamales que se los comió en cinco minutos. Has tomado desayuno le pregunte?

Y me dijo. - si señor el lunes pasado lo hice.

Se me hizo un nudo en la garganta.

Desde cuando eres aliancista Alejandro? Desde que mi abvelito me traía al estadio cuando yo tenia 6 años pero el ya se murió hace 2 años y yo le prometí venir siempre al estadio a ver a alianza.

En las mañanas trabajo vendiendo caramelos para ayudar a mi madre y en la tarde me voy al colegio.

Tengo dos hermanas que también estvdian y trabajan, mi padre desapareció hace mvcho , es mas ya ni me acuerdo de su cara y mi abvelito era el que nos cuidaba y daba todo. El ya no esta como le dije.

Y que te dejo tu abuelito le pregunte? , Como que señor? Me dijo.

Bueno no se donde vives, les dejo una casa o una pensión?

Yo vivo en carabayllo en una casita de dos ambientes mi abuelito era albañil.

O sea que no heredaron nada? No señor mi abuelito me dejo a alianza.

Que mas pvedo pedir es lo mas lindo del mvndo , poder dejar de comer, de dormir , sentir frió pero tengo a alianza y eso es lo lindo que puede haber en la vida.



No pude contener las lagrimas, le pregunte como se llamaba tv abvelo y me dijo. Jose señor

. En ese momento me temblaban las piernas y se me entrecortaba la voz.

Vamos a la tribvna le dije , vas a estar a mi lado todo el partido y quiero verte cantar y saltar.

Me dijo, mas bien a usted señor qviero verlo así porque no lo veo muy convencido de alianza.

Ese niño me sintió, de alianza estaba convencido pero había perdido la motivación de seguirlo, la motivación de vivir, había equivocado el rvmbo, lo que prometí no lo cumplía porqve la tristeza y la monotonía habían cvbierto mi vida y mi corazón.

Yo soy demasiado aliancista igval que tu , le dije , yo también tuve un abuelo que se llamaba José y me enseño a querer a esta camiseta hermosa , el también me traía al estadio.

Entramos a la tribvna, cantamos, saltamos y nos abrazamos celebrando los dos goles con los que ganamos el clásico.

Mis amigos se sorprendieron de verme evfórico, sintieron que me recvperaron, mis demás amigos de la barra como chaira, la kity, amargo , ken , coyote , jotita , termita , caballito , la barbie , la perica y todos los demás se emocionaron de volverme a ver en la tribvna , cantar y gritar , saltar y llorar por cada gol de alianza.

Mi vida volvió a ser blanca y azvl.

Mi vida volvió a ser como antes.

Hoy sigo escribiendo (avnque mal), voy al estadio a todos los partidos , viajo cvando pvedo y acompañado siempre de dos personas, de mi amiguito Alejandro Nicolás y de mi abvelo José que esta siempre a mi lado.

Mi abvelo me mando a este angelito para que me abra los ojos y para que yo vele por el.

a partir de esa fecha me encuentro con alejandrito 3 veces a la semana , almorzamos juntos antes que el vaya al colegio , conversamos de fútbol y quedamos siempre para vernos el fin de semana y entrar juntos a la tribuna.



Alejandrito quiere ser fvtbolista y yo un escritor, el me dice que todo lo que escribo es mvy bonito y yo le digo que el jvega al fvtbol como maradona y va a llegar a jvgar en alianza y yo celebrare sus goles desde la tribuna svr.



Gracias dios, gracias señor de los milagros, gracias abvelito José, gracias a la vida, gracias alianza.

Gracias amigos por todo, gracias Alejandro Nicolás.

Gracias a ustedes he regresado, he vuelto a ser el de antes he recuperado a mi familia la carnal y a la aliancista.



Y hoy prometo nunca mas alejarme de ustedes y estar siempre en casa los fines de semana para almorzar en familia y estar en la tribuna svr y lo haré por ustedes, por mi alianza , por mi abvelo José y por Alejandro Nicolás y sobre todo por mi.







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CON MVCHO AMOR PARA JOSE AVRELIO CARPIO CHIRI Y ALEJANDRO NICOLAS CRVZADO RODRIGVEZ.



LOS DOS ESTAN EN MI CORAZON Y EN MI VIDA.